El Castillo de Fajardo, más conocido como el castillo de Vélez-Blanco, se asienta sobre un espolón del monte Mahimón sobre el pueblo de Vélez-Blanco.
Con magníficas vistas sobre la valle de Vélez Blanco el castillo aparece en muchas postales, libros y publicaciones de la provincia de Almería
Considerado uno de los mejores ejemplos de estilo renacentista en España, combina precedentes góticos indígenas e hispano-morales, como arcos rebajados y techos de madera plana con vigas a la vista, con los cánones arquitectónicos y motivos ornamentales del Renacimiento italiano.
Su construcción se suele atribuir a los arquitectos italianos Francisco Floretín, Martín Milanés, Francisco Fernández y Michele Carlone, cuya presencia también está documentada durante estos tiempos por haber trabajado en el Palacio de La Calahorra de Granada.
El castillo fue declarado Monumento Nacional (Bien de Interés Cultural) el 3 de junio de 1931 y en diciembre de 2004 la Junta de Andalucía realizó una venta de acuerdo con el propietario, Salvador Ferrandis Álvarez De Toledo, Marqués de Valverde, y la venta se completó en 2005.
Jesús Romero, Director General de Bienes Cultures dijo: «Ahora podemos decir que el Castillo de Vélez-Blanco es propiedad de la Junta de Andalucía, por lo tanto, es propiedad de todos los andaluces, y naturalmente de todos los almerienses y lo más importante de los residentes de Vélez-Blanco ‘